Algunos materiales permiten el paso de la luz, les llamamos transparentes porque podemos ver claramente a través de ellos, por ejemplo los vidrios y las micas de los anteojos, el parabrisas de un automóvil o el plástico de los porta credenciales.
Los materiales que no dejan pasar la luz y que no podemos ver nada a través de ellos se llaman opacos. Ejemplos de cuerpos y materiales opacos serían una pared de ladrillos, el piso de cemento, una placa de metal o una lata de aluminio.
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